ESCRITOR FANTASMA

                                                   BLOG LITERARIO VECTOR Y VERSO 49 

                                                          

                                                               ESCRITOR FANTASMA

Los escribanos de las plazas y aceras se resisten a extinguirse. Armados con sus máquinas de escribir Brother, Olivetti, Olympia… dan forma, por medio del lenguaje, a los sentimientos y pensamientos que necesitan expresar sus clientes que no cuentan con la preparación necesaria para ello. Los delgaduchos tipos entintados en la cinta, cual herreros, marcan con palabras descalzas la piel de las límpidas hojas.

Los encargos que recibían, de forma especial las cartas de amor, cuando se las abonaban dejaban de ser suyas. Vaciaban sus mentes para llenar el estómago, no solo de ellos sino, también, de sus familias.

La figura de las personas escribientes, lejos de desaparecer, ha ‘evolucionado’. Guardando las distancias, mas no la metodología, se la conoce como: escritor fantasma ghostwriter. Término menos peyorativo que ‘negros literarios’ a los que explotaba Alejandro Dumas padre. Estas personas, a diferencia de las anteriores, están mucho más preparadas y equipadas. Reciben encargos de cartas, ensayos, discursos, novelas… percibiendo una remuneración, previamente pactada por ello; este mismo artículo puede que lo haya escrito yo o una escritora fantasma. Si detectan errores en el texto, pueden estar seguros de que no lo realizó una ghostwriter.

En los últimos meses hemos visto, con incredulidad y estupor, que al ChapGTP lanzado por OpenAI, también se le puede encargar trabajos aún más sofisticados que los señalados. Tecnología muy necesaria, pero de la que se aprovechan personas inescrupulosas, como algunos estudiantes norteamericanos que la utilizan para que les realice las tareas, motivo por el que las autoridades han prohibido su uso en los institutos. Antes eran los abusones los que utilizaban a los cerebritos para aquello, ahora son estos últimos que abusan de esta tecnología de punta, porque para los primeros, imagino, es tarea imposible. La originalidad en los campos del conocimiento humano es producto solo de una conciencia espiritual plena, capacidades de las que carece el ChapGTP.     (RCR)