Son tus reproches palabras, entre, tenaces y adorables,
se cuelgan en la puerta abierta de todas mis acciones,
horadan la llana superficie de mi playa anegable
y desnudan la ternura de mis tristes emociones.
Cual eco ensordecedor me repiten constantemente
mis olvidos, mi tristeza y mi entrega desmedida.
Aunque nunca aciertes en lo que pasa por mi mente,
te amo y te amaré, con locura, para toda la vida.
Son tus reproches la mano que dirige mi escritura,
son rebeliones taciturnas de una lluvia de mayo,
suenan como el do, re, mi, fa, so, la, sí de mis partituras,
que, con un tierno y dulce beso, simplemente, los callo.
(rcr)
Re bonito mi amigo
ResponderEliminarHacemos reproches cuando más amamos, todo tiene un significado
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